das Ubermensch in Freeland Republic
sábado, octubre 28, 2006
 

3

Hoy ha sido, mañana, y siempre es lo mismo… Y conseguirá una escopeta e ira a la granja de la I-S y disparara a un puñado de vacas estupidas. Jaja! De todos modos están sentenciadas. Son muchos los animales que están hechos para morir. Quizás les corte la cabeza y las vacíe y se ponga una de mascara, Si! Por diversión, Porqué si. La humedad de una de esas cabezotas pesadas… Le encantaría saber que se siente dentro. Su pelo limpio terminaría ensangrentado, su cara mojada, sucia de todo lo que no hubiese extraído bien antes de ponerse la puta cosa en la cabeza

Trepando la ventana fingiendo bailar – Dave Eggers

Están sentados, en el cordón de una banqueta, esperando. Es de madrugada, y este día no están lo suficientemente borrachos, solo se escucha silencio, los dos se ven muy pensativos hasta que el personaje2 empieza a hablar:

-Ya se lo que vamos a hacer- el personaje1 solo lo ve- Vamos a quemar la ciudad.

El silencio vuelve, y el personaje1 se queda atónito, no puede comprender como no se le había ocurrido antes esa idea, sabe que el fondo de lo que acaba de decir, es algo mucho mas grande que todo pensamiento ordinario, sabe que ponerse metas mucho mas grandes de las que se pueden realizar es un acto de mucho valor, y de una enorme precisión. Quemar la ciudad.

-Solo si la quemamos mientras la gente esta dormida- lo dice detenidamente el personaje1.

***

El personaje3 camina por la calle con el personaje2 y este último le habla de lo que tienen en mente:

- Hablar y hablar, ya me canse de hablar.

- Y tienen idea como hacer esto,-le contesta el personaje3.

- Como lo vamos a hacer, no tengo ni puta idea, pero aquí es donde tú nos ayudas a poder hacer esto.

El personaje3 suelta una carcajada,- Yo les voy a ayudar a hacer eso?- lo pregunta burlándose,- mira mi vida es un desmadre mucho mas grande que tu idea de crear un mundo diferente.

-No queremos cambiar el mundo,- hace una pausa- solo lo queremos quemar.

***

- Crees que tengo todo el tiempo para poder hacer las estupideces de las que me hablas?.- le pregunta Marta –no tienes idea de las cosas que dices.

El personaje3 se queda quieto, no tiene idea que demonios le puede responder, por mas que trate de convencerla no lo va a lograr, aun así se acerca y le dice.- es la ultima vez que te lo pregunto, y si me respondes que no, en mi vida te quiero volver a ver.

Ella se detiene, y se le queda viendo,- a mi me gusta el mundo como es, esta lleno de hijos de puta como tu, y si vieras que ya me acostumbre a eso,- hace una pausa.- quieres mi respuesta?, yo digo que te pudras en el intento, como tu dices, solo estamos de paso.

El se le queda viendo y le dice.-Ya te puedes ir.

Marta se da la vuelta y se va.

***

El personaje1 camina por la calle, y entra en un edificio de oficinas que luce moderno, la mujer que atiende el lobby se fija en lo que trae puesto y con tono bastante grosero le pregunta que es lo que quiere, el solo le sonrie, y pasa directo hasta el elevador, ella le habla al guardia, el elevador se cierra.

***

El personaje2 esta nervioso, nuestros 3 personajes están sentados en una banca de un parque, el parque esta lleno de gente.

- Y después de aquí, que va a ser de nosotros- pregunta el personaje2.

- Nunca ha sido nada de nosotros, nosotros no existimos- lo dice de forma desinteresada el personaje1.

El personaje3 ni los voltea a ver, el sigue fumándose su cigarro, en eso dice.

-por el dinero y la fama.

Todos se sueltan riendo, y eso hace que se destense el momento, se levanta y les pregunta que si ya pueden empezar, los otros 2 se levantan, y en eso empieza la función.

 
domingo, octubre 15, 2006
 

2

…cuando veo que alguien se arranca una uña con unas tenazas, luego permite que le caguen encima y para terminar se come la mierda de su verdugo, me parece asqueroso. Pero lo que me interesa, precisamente, es el lado asqueroso del ser humano.

Plataforma - Michel Houellebecq

Una mujer esta comiendo sola en un restaurante, es de esas personas que valoran realmente el silencio, come un bocado mientras observa detenidamente hacia la calle, ve el caminar de la gente, aunque realmente pareciera que su mirada esta completamente perdida, físicamente es muy guapa, y parece de esas mujeres que sus padres fueron hippies y fumaban marihuana cuando ella empezaba a gatear, esto lo supongo por sus rastas y los piercings que tiene en la cara, aquí es donde aparece nuestro tercer personaje, caminando deprisa por la calle, como si tuviera muchas cosas que hacer, aunque como nuestros personajes anteriores, solo trabaja cuando ya no tiene que comer, ve una foto grande del menú del día, y se detiene para ver el precio, en eso la ve sentada, muy solitaria, el espera para que ella volteé a verlo pero no, ella tiene la mirada hacia la calle, el entra y pide la cerveza mas barata, se sienta a un lado de ella, la voltea a ver para empezar a hablar:

- Hola -le dice pero ella no lo voltea a ver, en eso siente que se le encorva la espalda, y recuerda todas esas veces en que al hablarle a alguna mujer guapa, solo tenia como respuesta un puto silencio, intenta volver a decir hola, pero tartamudea, le da un trago a la cerveza y le vuelve a hablar – como te llamas?.

Ella lo voltea a ver, y le dice – perdón, que me dijiste.

- Como te llamas -le dice con un tono más fuerte.

- Para que quieres saber mi nombre -le pregunta con cierta inquietud.

El no tiene idea que contestarle, y duda del porque esta haciendo esto, recuerda que sus experiencias anteriores nunca ha sido algo bueno de mencionar, e inmediatamente se vuelve unas semanas atrás, justo cuando caminaba por la calle, y le dijo directamente a una mujer lo mucho que le gustaría meterle su miembro profundamente, y ella reaccionó gritando descontroladamente, recuerda que era un parque, le parece que era domingo porque estaba lleno de niños jugando y familias enteras tratando de ser felices, entonces se dio cuenta que era mala idea, porque en ese momento vio a un tipo que le agarraba la mano, y no obstante, férreo a sus impulsos, lo siguiente que hizo fue propinarle un golpe, vio como la nariz de este hombre se llenaba de sangre, justo cuando corría de la escena, pensó en el papel que representaba en esta sociedad, insinuándosele a las mujeres con las que consideraba digno copular, y enseguida actuando violentamente frente a una reacción que el consideraba de rechazo, pensó en los perros, y recordó una imagen de niño que jamás se le quito de la cabeza, paseaba con su perrita ,raza french pon) y un perro inmenso la ataco por detrás, le mordía la espalda, hasta que la sometió, en eso la violo durante un buen rato, el siendo el dueño de su perra no hizo nada, solo vio la escena, no entendía porque el perro hacia eso. Años después lo entendió, y supo perfectamente cual era su rol dentro de la sociedad en la que vivía.

- Marta –le dijo- me llamo Marta– y tú quien eres- le pregunto mientras sacaba un cigarro.

- Que piensas cuando un tipo llega de la nada preguntándote tu nombre –lo dice tratando de desenvolverse.

- Que es un hijo de puta que me quiere coger- le dice mientras lo ve a los ojos- y tú que piensas cuando te digo hijo de puta.

El se queda pensativo, la ve con odio, porque sabe que no va a ser nada fácil tratar de lograr algo.

- Entonces quieres coger, o me vas a dar un sermón de la cantidad de hijos de puta que respiran en este mundo- se lo dice con bastante desenvoltura.

- Mira, ahora si has dicho una frase sin detenerte -Martha le dice- ahora si podemos empezar a hablar.

El se voltea y le pide una cerveza al cantinero, Marta se le queda viendo, y le pregunta:- no me vas a invitar una?.

El sin mirarla y comiéndose las uñas le dice:- no, el que necesita la cerveza soy yo.

 
 

1 Intro

La escena es la siguiente, dos hombres sentados en un bar que tiene cierto estilo caótico, mejor dicho que huele mal; tienen la necesidad de hacer algo realmente impresionante con sus patéticas vidas, desean remover algo de la mierda que se ha quedado pegada durante tantos años en los intestinos de la gente que los huele diariamente, obviamente solo al estar en un cierto grado de embriaguez son capaces de poder admitirlo, y solamente en este grado pueden ser capaces de poder planificarlo, por un lado tenemos al personaje1, un hombre con aires de paranoia, pelo largo, barba descuidada, da la impresión de siempre estar nervioso, digamos que suda frió cada vez que alguien lo encara, pero la realidad es muy diferente, es quizás una de las personas mas seguras al momento de defender lo que piensa, y es que lo que piensa de la sociedad en la que vivimos no es nada grato, tal vez es una de las ideas mas pesimistas de la sociedad que nos rodea, sin tratar de ser moralmente incorrecto, el tiene años viviendo de lo que recoge de la calle, o haciendo actuaciones por unas cuantas monedas, todo esto desde el momento en que quiso emanciparse de las ataduras de la sociedad que lo rodeaba, aunque talvez no pensó en ese momento que lo único que lograría con esto seria interpretar al personaje del vagabundo encabronado con la vida que quiere que la gente conozca lo mas profundo de sus propias entrañas, del otro lado de la mesa tenemos al personaje2, un hombre muy serio, es potencialmente un alcohólico, y siempre usa el mismo traje, esta convencido que la moral, es algo que desgasta, cree que carece de sentido el tratar de darle un sentido a la vida, de darle una línea para poder respetarnos, cree que debemos llegar al punto en que el respeto desaparezca, que estamos dejando de ser humanos al tratar de no ser animales, el quisiera que alguien llegara y lo golpeara, solo para sentirse mas vivo. Triste seria tratar de estereotipar a nuestros personajes, ya que ninguno de ellos tiene la fuerza para poder interpretar su papel, y por ende sus vidas son una constante contradicción de sucesos, pensamientos y acciones. Justo cuando piensan actuar, caen en la cuenta de que es un absurdo el creer en algo, y peor, el tratar de llevarlo a cabo, aunque quizá eso sea lo que realmente los mueva, el absurdo. El creer que algo es realmente importante como para que pueda influir en lo sucesos de los demás, y es aquí donde llega justamente la conversación que tienen nuestros personajes, recordando que solamente al estar alcoholizados pueden hablar de esto:

- y que tal si matamos a alguien- dice el personaje2 – que tal si lo desollamos y lo colgamos en un parque o algo parecido- esto ultimo lo menciona con una voz mas fuerte, tratando de convencerse a si mismo.

El personaje1 no hace buena cara – matar a alguien, y eso en que nos beneficia, que logramos con eso - trata de recordar algún asesino famoso y el beneficio que logro con ello, pero solo recuerda a Charles Manson, y eso es hablar de mucho glamour, - no tenemos la facilidad de palabra para poder hacer una secta -.

- yo nunca dije que hiciéramos una secta - le contesta el personaje2

- pues no, pero necesitamos referencias, y dime una?- espera una respuesta – pues a mi me viene a la mente Charles Manson, y lo que digo es que no tenemos la gente para poder hacer algo así – en el momento en que termina de decir esta frase, viene un silencio.

- Si vamos a matar a alguien lo tenemos que hacer bajo un concepto, o digo, no ha cualquier pobre diablo que camine por la calle le vamos a meter un martillo en la cabeza – lo dice tratando de que el personaje1 complemente su frase.

- Me parece bien, pero – hace una larga pausa, - que tiene de malo que sea cualquier pobre diablo que camine por la calle, digo, - vuelve con la pausa y le habla al mesero para que le den otra cerveza, - préstame dinero, me faltan 10 pesos -.

- Toma – saca de su bolsa un montón de monedas, y demás basuras.

La pausa vuelve, y les traen la cerveza. Ellos están convencidos de hacer algo, pero no saben que, y en el momento que sepan que es lo que quieren lograr al hacer ese algo, talvez puedan empezar a definir como lo pueden lograr, pero eso si, de lo que están totalmente claros, es que primero necesitan hacerse de un concepto, antes de poder empezar a planear la forma de lograrlo. Obviamente el alcohol esta nublando cada vez mas sus ideas, e instantáneamente su conversación se pone un tanto erótica, al ver que entra un grupo de mujeres, que aunque no estén verdaderamente bien, el alcohol les recuerda que talvez esa falta de sexo, o mejor dicho esa abstinencia de apareamiento es lo que los ha llevado a estas circunstancias, de pronto se acaban esa caguama, y aparentemente, sin darse cuenta ya tienen una mas en la mesa, el personaje1 se empieza a reír sin sentido, el personaje2 empieza a perder la mirada.

Pantalla a negros, empieza el titulo de la película.

Suena música de Bathory.

 

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